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Representantes del sector tecnológico, así como de las instituciones, en Latinoamérica se dieron cita este lunes en la Cumbre Latinoamericana de Telecomunicaciones y Desarrollo, cuyo objetivo es impulsar un pacto regional para hacer frente a la piratería de contenidos audiovisuales y de otros productos digitales, con una alianza en la que ya participan algunos gobiernos del continente americano.
La sesión inaugural del evento tuvo lugar este lunes, celebrada en la sede de la Organización de los Estados Americanos (OEA) en Washington, contó con la participación de los titulares de organismos de la región, que abordaron las expectativas del sector de medios y frecuencias y los desafíos que plantean las telecomunicaciones en la era digital.
Organizado por la Comisión Antipiratería del Centro de Estudios Regulatorios y de Telecomunicaciones (CERTAL), el evento reúne a expertos, representantes de medios y empresas de difusión, quienes dialogarán, este lunes y martes, las expectativas del sector de medios y frecuencias y los desafíos que plantean las telecomunicaciones en la era digital.
Las telecomunicaciones siempre se han considerado como un aspecto inminentemente técnico, pero no es así, explica a la Voz de América Vianna Maino, ministra de Telecomunicaciones y de la Sociedad de la Información de Ecuador, quien acudió a la sesión inaugural del evento, organizado por la Comisión Antipiratería del Centro de Estudios Regulatorios y de Telecomunicaciones (CERTAL).
“Usualmente las comunicaciones se han visto como un tema técnico, pero hoy por hoy las telecomunicaciones son un mecanismo de inserción social, de democracia, de llevar conocimiento de libertad de expresión y comunicación a todos por igual; no hay nada más inclusivo hoy que las tecnologías de las comunicaciones”, dijo la ministra Maino.
La titular ecuatoriana explicó que el ejecutivo de Lasso está comprometido con la conectividad de los sectores más alejados de los polos de desarrollo en el país andino. En un año y medio han avanzado a abrir el espectro a unos cuatro millones de 18 millones de sus nacionales estimados en rezago, indicó.
También recordó que Quito utilizó herramientas como la nueva Ley de Comunicaciones para hacer más asequible las frecuencias a todos los sectores del país y ampliar el rango de la libertad de expresión «al más alto nivel».
“Es un signo de desigualdad que vamos superando en nuestro país, también debemos incluirlos y capacitarlos para que puedan desenvolverse en este mundo tecnológico que hoy por hoy es eje de democracia y de igualdad (…) La democracia está basada en la libertad de comunicación”, comenta la ministra Maino.
El presidente de SIP, Michael Greenspon, comentó que para el organismo que aglutina a cientos de medios de comunicación del continente americano genera “entusiasmo” ver un avance importante que ratificar el Pacto Global Antipiratería de Contenidos Audiovisuales y la “Declaración de derechos y principios en el entorno digital”.
“Hoy más que nunca podemos observar en nuestros países las consecuencias sociales desatadas cuando la libertad de expresión y la libertad de prensa son atacadas y atropelladas por autoritarismos”, comentó Greenspon en su presentación.
Los metas para unificación regional
El presidente de CERTAL, Pablo Scotellano, comentó a la VOA que llevar la principal discusión del año para este organismo -en la capital estadounidense- es importante por la convergencia que hay Washington de actores de gobiernos, organismos y sociedad civil con alta incidencia en todo el continente.
“Nos parecía un lugar fundamental para impulsar el Pacto Global Antipiratería y unificar a América Latina y Estados Unidos en un trabajo conjunto, porque existen muchos esfuerzos donde organizaciones, gobiernos y empresas trabajan contra la piratería”, dijo Scotellano.
Durante esta cumbre en Washington desarrollan discusiones técnicas, acuerdos y agendas programáticas, que según el presidente de CERTAL puedan generar avances para promover políticas concretas en los gobiernos de la región.
“Primeramente un manual de recomendaciones para los Estados de las cuales entendemos muy positivos, con la participación de la OEA, Uruguay por ejemplo ha decidido convertir el Pacto en un decreto, estamos trabajando en ello», comentó.
Otros países como Ecuador, Colombia ya trabajan para hacer que el pacto de paso a una ley y que posteriormente tenga más incidencia en el resto de países latinoamericanos.
“Refrendar este pacto hoy en Washington tiene una simbología política, una estrategia y también tiene una acción de compromiso de que las Américas en general de combatir la piratería que genera un daño muy fuerte a la industria de las telecomunicaciones”, apuntó el presidente del organismo.
El plan inicial es la creación de programas para cerrar sitios de piratería, pero a la vez impulsar el trabajo interno en cada país ayudando a la capacitación de jueces y fiscales especializados para impulsar la parte punitiva en el abordaje de la problemática.
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